miércoles, 4 de julio de 2012

seguirdad

Tenía tanto miedo de quedarme sola conmigo misma que me inventaba amigos imaginarios, que jugaba todo el tiempo hasta que ya fui demasiado mayor para hacerlo. Mis distracciones se convertieron en leer, escribir y estar acompañada. Siempre me he considerado alguien muy negativa, alguien que cuando está solo no deja de pensar hasta que lo ve todo tan negro que no siente ganas de seguir viviendo esa vida.
No sé lo que ha cambiado, en que momento me he convertido en esta persona que cree de pronto en sí misma, que piensa que si que la miran y que no pasa desapercibida. Dicen que soy guapa, y desde hace dos meses me lo dice todo el mundo, que antes solo me decían "bonica" y por decir algo. No creo que lleven mucha razón, pero por una vez me están subiendo el autoestima, por una vez no pienso que es mentira, si no que veo la verdad en sus ojos, y me siento bien. Tengo una seguridad que nunca había experimentado, y me da igual lo que piense la gente. Ya no m siento aplacada por mis amigos, como si todos fueran mejores que yo, ahora no pienso que haya nadie mejor que yo, ni tampoco peor. Simplemente pienso que todos somos  iguales, y que unas personas destacan más en unas cosas que en otras, pero no existe mejor o peor que los demás. Por eso sé que todo va a ser diferente a partir de ahora, que me verán diferente. Nunca he mostrado seguridad en mi misma ya que nadie me la ha inculacado, y ahora que la tengo puedo sorprender a más de uno. Además la gente que no tiene esa seguridad suele tener envidia de la que sí.
Pero ya no me importa nada de esas idioteces que hacen que la gente se pelee. Hace poco tuve una pelea, algo que me molestó, y no estaba dispuesta ni a perdonar ni a volver ha hablarles. Pero aquí estoy, les he perdonado y no guardo rencor alguno. Y fue en ese momento, cuando me di cuenta de que todo es como nosotros queramos verlo, que los problemas los hacemos nosotros y que la felicidad depende de como vayamos a vivir la vida.
Por eso dejo pasar los enfados y las peleas tontas, porque se puede perder mucho en ellas.
Y sinceramente os digo, que no merece la pena. Ser superiores a los demás y no continueis la pelea, habreis ganado otra batalla. Creérme.

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